Alerta Colza: Gorgojo y Pulgón - Claves para proteger tu cultivo

El cultivo de colza está en auge, con un notable incremento en la superficie cultivada durante los últimos años. Este cultivo, que mejora la estructura del suelo y facilita el control de malezas, se presenta como una excelente alternativa para la diversificación y rotación de cultivos en la región. Un estudio reciente (2021-2022) sobre variedades de colza destaca la importancia de este cultivo para la región. Sin embargo, es crucial estar alerta frente a las principales plagas que pueden afectar su rendimiento y la calidad del grano: el gorgojo y el pulgón.

El enemigo en detalle: El Gorgojo

Distintas especies del género Ceutorhynchus pueden afectar al cultivo de la colza. Es fundamental identificar la especie predominante en tu zona para un control más efectivo. Un control temprano del gorgojo es crucial para prevenir pérdidas significativas en el rendimiento.

Ciclo de Vida:

El ciclo de vida del gorgojo varía según la especie y las condiciones climáticas. Algunas especies inician su actividad a finales de invierno, mientras que otras pueden estar activas incluso antes. En general, los adultos emergen del suelo cuando las temperaturas comienzan a subir. Los adultos empiezan a volar cuando las temperaturas del suelo superan los 8ºC, siendo la temperatura ambiental óptima para la puesta de huevos entre 12 y 15ºC. Las hembras realizan la puesta en los tallos de la colza, y las larvas se desarrollan en su interior alimentándose de las membranas del tallo.

Condiciones Predisponentes:

■ Temperaturas suaves en invierno y primavera.

■ Humedad en el suelo.

■ Presencia de crucíferas silvestres que pueden servir como refugio de la plaga.

Hospedantes:

El principal hospedante del gorgojo es la colza, pero también puede afectar a otras crucíferas cultivadas o silvestres.

Un peligro constante: El Pulgón

El pulgón de la colza (Brevicoryne brassicae) es una plaga común. Estos diminutos invasores, con sus afilados aparatos bucales, se agrupan en las hojas y tallos tiernos de la colza, succionando la savia vital que la planta necesita para crecer.

Ciclo de Vida:

El pulgón se reproduce rápidamente, y las hembras pueden dar a luz a crías vivas sin necesidad de apareamiento (partenogénesis). Esto les permite formar colonias numerosas en poco tiempo. En su ciclo de vida, el pulgón presenta dos formas en su estado adulto: una alada y otra áptera. Las formas aladas se desarrollan y migran a otras plantas hospederas cuando la calidad de la planta disminuye o existe una sobrepoblación de áfidos.

Condiciones Predisponentes:

■ Temperaturas cálidas.

■ Exceso de nitrógeno en el suelo.

■ Presencia de malas hierbas que pueden servir como refugio.

Hospedantes:

Además de la colza, el pulgón puede afectar a otras crucíferas.

Riesgos para el Cultivo y Momentos Críticos

Impacto y Momentos Clave de Ataque

Daños del Gorgojo:

Las larvas del gorgojo causan daños al alimentarse en el interior de los tallos de la colza, provocando deformaciones, necrosis y retraso en el desarrollo. Los adultos también pueden dañar las hojas y brotes. Estos daños pueden afectar el rendimiento y la calidad del grano. Además, es importante destacar que el daño causado por el gorgojo de las silicuas (Ceutorhynchus assimilis) puede facilitar la infestación del mosquito de la colza (Dasyneura brassicae), lo que puede agravar aún más los daños en el cultivo.

Daños del Pulgón:

Los pulgones debilitan la planta al succionar la savia, causando deformaciones y retraso en el crecimiento. Además, excretan una sustancia azucarada llamada melaza, que favorece el desarrollo de fumagina, un hongo que afecta la fotosíntesis. El pulgón también puede transmitir virus a la colza, afectando el rendimiento, el contenido de aceite y aumentando el riesgo de transmisión de enfermedades.

Momentos Críticos:

Monitoreo y Control

Estrategias de Manejo Integrado

Monitoreo:

■ Gorgojo: Utilizar trampas amarillas para capturar adultos y determinar los umbrales de intervención. Observar las plantas para detectar daños en tallos y hojas. También se puede recurrir al método de "golpes a las plantas" para detectar la presencia de gorgojos.

■ Pulgón: Observar las plantas para detectar colonias de pulgones en hojas y brotes.

Control:

■ Medidas Preventivas: Rotación de cultivos con especies no crucíferas, eliminación de restos de cosecha y control de crucíferas silvestres.

■ Control Biológico: Favorecer la presencia de enemigos naturales como mariquitas y crisopas. Mantener agroecosistemas diversos ayuda a fomentar la presencia de estos insectos beneficiosos que controlan las poblaciones de pulgones de forma natural.

■ Control Químico: Utilizar insecticidas autorizados en colza, siguiendo las recomendaciones de la etiqueta y respetando los plazos de seguridad.

Síntesis y Conclusiones

El gorgojo y el pulgón son plagas importantes que pueden afectar la producción de colza. Para un manejo efectivo, es fundamental identificar las especies de Ceutorhynchus predominantes en tu zona, ya que su ciclo de vida y los momentos de mayor riesgo pueden variar. Un manejo integrado que combine medidas preventivas, como la rotación de cultivos y el control de malezas, con el fomento de la biodiversidad para el control biológico, es esencial para minimizar el impacto de estas plagas. El monitoreo constante del cultivo, utilizando trampas amarillas y la observación de las plantas, permite detectar la presencia de las plagas a tiempo y tomar las medidas adecuadas.

En caso de ser necesario recurrir al control químico, recuerda utilizar solo insecticidas autorizados en colza, siguiendo las recomendaciones de la etiqueta y respetando los plazos de seguridad.