Remolacha: Protección del medio ambiente que realmente vale la pena
La remolacha azucarera es un verdadero todoterreno: sirve como materia prima para la producción de azúcar, un sabroso añadido a la alimentación del ganado o un proveedor de energía para la producción de biogas. Además, el cultivo de este multi-talento puede proporcionar una serie de ventajas para la protección del medio ambiente. Las remolachas conservan el suelo, el agua y los recursos. Por cierto, la remolacha azucarera es fuerte hoy y será aún más fuerte mañana!
La remolacha azucarera contribuye a la protección del medio ambiente
absorbiendo nutrientes desde capas más profundas del suelo. Dado que tiene una temporada larga de crecimiento, la remolacha aprovecha el nitrógeno mineralizado de materia orgánica y contrarresta la lixiviación de nitratos en las zonas profundas del suelo.
La remolacha es un verdadero todo terreno
ya que no solo se puede utilizar en la producción de azúcar, sino también para producción de etanol y biogás. Por su alto contenido energético, también puede usarse en alimentación animal. Además, la remolacha mejora la palatabilidad de otros alimentos ganaderos.
Remolacha: la combinación perfecta para las rotaciones de cereales:
La remolacha como cultivo de primavera “no cerealista” favorece a los cereales en la rotación.
Las malas hierbas típicas de los cereales de invierno, quedan fuera de ciclo y los herbicidas de la remolacha facilitan su control. Además, la remolacha no alberga plagas y enfermedades de los cereales e interrumpe sus ciclos de desarrollo.